ESTRATEGIAS METODOLOGICAS ORIENTADAS A TRABAJAR CON ESTUDIANTES CON DISCAPACIDAD AUDITIVA
La discapacidad auditiva es la incapacidad parcial
(hipoacusia) o total (sordera) para escuchar, en uno o ambos oídos. Esto
produce un déficit en la adquisición y producción del lenguaje, por lo que el individuo
presenta dificultades en la integración y desenvolvimiento dentro de la vida
escolar, social y laboral.
Estrategias
metodológicas para aplicar dentro del aula
Estudiantes con
hipoacusia
Es importante que el estudiante que presente hipoacusia sea
leve, moderada o severa, utilice Audífonos.
En el caso de alumnos con hipoacusia leve o merada, no es
necesario hacer cambios significativos en la metodología, ya que si escuchan
pero en menor grado que las demás personas, por lo que en este caso lo más
recomendable es proporcionar terapia de leguaje para corregir errores en la
articulación, ubicar al niño en los primeros asientos y que el docente hable
frente al estudiante en voz alta y articulando de manera correcta.
Estudiantes con sordera
Para trabajar con niños con sordera es necesario realizar
actividades que permitan al estudiante primeramente adaptarse el medio.
Para ello se debe
tener en cuenta lo siguiente:
-La colocación de los
alumnos con discapacidad auditiva: Los estudiantes con sordera la
igual que los que presentan hipoacusia deberán
estar situados en el aula de tal
manera que tengan fácil acceso a ver el rostro del docente y a la
información visual para que, de esta forma, se vean favorecidos para la lectura
labio-facial, es decir de preferencia se los debe ubicar en los primeros asientos.
-La lectura labio-facial requiere
de un gran esfuerzo por lo que es necesario articular las palabras, de
forma clara y sencilla, a una velocidad moderada y teniendo presente que sólo
es posible leer “en los labios” lo que se conoce.
-Se debe evitar poner obstáculos en la boca (bolígrafos,
papeles, las manos, etc.)
-Facilitarles la información: Esto a través del empleo de
recursos visuales como: Mapas, dibujos, planos, fórmulas, tablas de multiplicar,
diferentes tipos de letras, fotografías, recortes de revistas, anuncios, recursos
tipográficos, utilizar diferentes ejemplos para explicar una misma cosa, favorecer
el uso del ordenador.
-Estimular el lenguaje: Una persona con discapacidad
auditiva puede hablar de manera correcta, por ello se debe reforzar este
aspecto, ya que evidentemente al no escuchar los sonidos, se les dificultará
expresarse y hablar.
-No se debe emplear frases demasiado largas, en este caso es
necesario dividir en oraciones más simples.
-Si hay un tema muy
amplio, lo más factible es dividirlo en
partes.
-Acompañar las palabras con mímicas y manipulación de
objetos siempre que sea posible y pertinente.
-Si el niño ya maneja lenguaje de señas, sería beneficioso
que el docente procure aprenderlo aunque sea gradualmente, y que comparta con
los compañeros de la clase el significado de ciertas señales para permitir la
interacción social.
-Una vez culminada la clase el maestro debe asegurarse de
que el niño ha entendido lo explicado, no conformarse con que el estudiante
diga si, sino hacer preguntas sobre el tema expuesto, en caso de no haber
entendido, se debe explicar de nuevo, de una manera más comprensible.
-Evaluaciones: Se debe aplicar pruebas objetivas (emparejar, completar, verdadero o falso, dibujar, pegar); realizar collages y dramatizaciones. En todos los casos, se requiere de la mediación del docente.
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